Una de las mayores sorpresas que se llevan los turistas al planificar un viaje por España es que la nación tiene una enorme ciudad llamada Ceuta, que se ubica en África. Y, al mismo tiempo, la segunda novedad es que allí se construyó la famosa Casa de los Dragones.
Este histórico edificio, que resalta en el casco histórico de la urbanización, gracias a la belleza de su diseño y sus enormes dragones, permanece en la misma esquina desde 1905.
Y, aunque ha experimentado diferentes cambios en los últimos 119 años, en la actualidad es un punto turístico muy concurrido, que incluso alberga comercios en su planta baja.
¿Cuál es la historia de la Casa de los Dragones de Ceuta?
La Casa de los Dragones surgió como un proyecto que encargó Francisco Cerni Gonzáles, que se desempeñó como alcalde de Ceuta entre 1897 y 1903.
Gonzáles deseaba adquirir una propiedad única en la ciudad, que resalte con su arquitectura ecléctica. Es por eso que contrató al arquitecto valenciano José Cortina Pérez, que escuchó todos sus pedidos.
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Puntualmente, el alcalde deseaba un diseño similar al Edificio de los Dragones, que Pérez había diseñado anteriormente en Valencia, España. Acto seguido, el profesional cumplió y la construcción de Ceuta se estrenó en 1905.
¿Por qué este edificio pasó 81 años sin sus figuras mitológicas?
El detalle decorativo más grande que tuvo la Casa de los Dragones al momento de su apertura, fueron las enormes y pesadas figuras mitológicas de bronce que se colocaron en su punto más alto.
Y, aunque en la actualidad es posible observarlas, pocas personas saben que los dragones actuales no son los originales. Estas piezas solo permanecieron en la propiedad hasta 1925.
Finalmente, 81 años después, en el marco de uno de los trabajos de mantenimiento que recibió el lugar, se instalaron nuevos dragones. En este caso, eran cuatro figuras diseñadas por Antonio Romero Vallejo, que utilizó resina y fibra de vidrio para reducir su peso a menos de 200 kilogramos cada uno.
¿Cómo se convirtió la Casa de los Dragones en un punto turístico?
Tras el paso del alcalde de Ceuta, la Casa de los Dragones quedó en manos de sus hijos. Luego, en 1946 la propiedad se vendió y pasó desapercibida durante décadas, hasta que se organizaron las primeras restauraciones.
Es decir, a pesar de que el estado del edificio de tres pisos siempre fue bueno, la fachada necesitó trabajos intensivos en 1973 y en 1996, para recuperar su esplendor.
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Es por eso que, actualmente, la Casa de los Dragones es un ícono de esta ciudad de España, que recibe la visita de casi todos los turistas que se desplazan hasta el destino de África.
