En la provincia de Tierra del Fuego se encuentra el tren más austral del planeta. Se trata del Tren del Fin del Mundo, una de las mayores atracciones de la ciudad de Ushuaia.
También llamado Ferrocarril Austral Argentino, esta línea de tren une el Parque Nacional Tierra del Fuego con las cercanías de la ciudad de Ushuaia y recorre una extensión de 8 kilómetros a una velocidad aproximada de 50 kilómetros por hora.
Su origen se ubica en el denominado “tren de los presos” que servía como medio de transporte de mercaderías de la Prisión Nacional de Ushuaia y que funcionó entre los años 1909 y 1952. Más tarde, una empresa privada se hizo cargo del ferrocarril y lo reconvirtió en una atracción turística.
La Prisión más austral del mundo y el tren de los presos
La prisión más austral del mundo se instaló hacia fines del siglo XIX en Ushuaia bajo la forma de una colonia penal, es decir, un establecimiento penitenciario donde las personas realizan trabajos forzados. Los antecedentes de ese modelo se encuentran en las colonias de países como Francia y Gran Bretaña entre los siglos XVIII y XX.
Los primeros prisioneros arribaron al complejo penitenciario de Ushuaia en 1884 y en 1902 se construye el ferrocarril de rieles de madera y locomotora de vapor para el transporte de materiales, principalmente leña, rocas y arena. En esa época, se lo conocía como el “tren de los presos” y partía por la mañana desde la prisión para ir en busca de las mercaderías y regresaba al finalizar el día.
En 1947, el gobierno de Juan Domingo Perón y su Director del Servicio Penitenciario Federal, Roberto Pettinato, clausuran el presidio y lo reemplazan por una base naval. Mientras el tren continuó funcionando para la producción de los aserraderos locales. Dos años más tarde un terremoto en la ciudad de Ushuaia bloqueó y destruyó gran parte de la línea. Ante la inacción del gobierno por reconstruir el ferrocarril, el servicio se hizo inviable y se cerró en 1952.
Reconversión turística
Recién en el año 1994 se procedió a la reconstrucción de la línea del ferrocarril con un objetivo turístico. Una empresa privada decidió revivir la leyenda y lo bautizó como el “Tren del fin del mundo”.
El recorrido comienza en la “Estación del Fin del Mundo”, que se encuentra a 8 kilómetros de la ciudad de Ushuaia, rescatando los últimos 7 kilómetros del recorrido original con una parada intermedia en la “Estación La Macarena” en donde los pasajeros pueden disfrutar de una gran vista panorámica y luego continuar el recorrido, para ingresar al Parque Nacional Tierra del Fuego.