Las empanadas argentinas son un plato clásico, que se ha convertido en una tradición nacional porque es una receta que atraviesa todas las clases sociales, presente desde hace más de 200 años en el país.
En cuanto a su elaboración no hay reglas. Es posible cocinarlas fritas o al horno, además de agregarle todo tipo de carne, quesos, verduras y hasta frutas secas como la pasa de uva.
Sin embargo, más allá de la preferencia de los comensales, no hay dudas de que las empanadas son un plato histórico, que vinculan a todas las familias argentinas.
¿En dónde se inventaron las empanadas?
Como suele ocurrir con platos de estas características, aún no se ha podido descifrar con exactitud el lugar y el momento en el cual se inventaron las empanadas.
De todas formas, la teoría más certera indica que las primeras fueron cocinadas hace más de 2.000 años. Pero, su popularidad comenzó a crecer recién en el siglo XIII, cuando las recetas se establecieron en Grecia y España.
Finalmente, el primer libro de cocina que incluyó a las empanadas en su recetario se llama Llibre de Coch y fue publicado en Barcelona, a mediados de 1520, por Ruperto de Nola.
En este caso, el hombre dejó por escrito que, desde su punto de vista, las empanadas debían estar rellenas de atún, anguilas, trucha y congrio.
¿Cuándo se empezaron a cocinar las empanadas en Argentina?
La historia demuestra que las empanadas no son un invento argentino. Aunque, de todas formas, han logrado instalarse en nuestra cultura y, con el correr del tiempo, se convirtieron en una tradición nacional.
Pero, ¿cómo llegaron las primeras recetas a la Argentina? De la mano de los inmigrantes europeos, que arribaron al país durante los primeros años del siglo XX.
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Según los registros más antiguos, los españoles fueron los primeros en preparar y vender empanadas frías, que en un principio solo estaban rellenas de pan, legumbres y diferentes tipos de carne.
Luego, estas recetas fueron seguidas por las italianas, que también dejaron su huella en la sociedad argentina. En este caso, a diferencia de las españolas, se ofrecían como un plato caliente.
Entonces, debido a la gran oferta, su bajo costo y la facilidad para comerlas en cualquier lugar, muchos trabajadores de la época empezaron a comprarlas antes de cada jornada laboral y, de esta manera, dieron el primer paso para crear una nueva tradición.
¿Cuántos tipos de empanadas argentinas existen?
A diferencia de las primeras recetas de empanadas que incluían dos tipos (frías o calientes), en la actualidad hay múltiples variantes que no solo identifican la cultura argentina, sino también a sus regiones.
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Entonces, partiendo de una base vinculada al tipo de cocción (fritas o al horno), estas son las principales recetas de empanadas que existen en el país:
- Tucumanas - Suelen llevar carne cortada a cuchillo y muy jugosas.
- Salteñas - Pueden ser de varios sabores, pero siempre tienen papa.
- Porteñas - De sabores variados, cocinadas al horno y con alta presencia de cebolla.
- Catamarqueñas y riojanas - En su mayoría se preparan a base de carne de vaca o de cabra.
- Chaqueñas - Similares a las tucumanas, pero con carne de cordero.
- Santiagueñas - Rellenas de carne picada, arvejas, cebolla y huevo duro
- Cordobesas - A diferencia de otras empanadas argentinas, las cordobesas son agridulces y llevan pasas de uva.
- Correntinas y misioneras - Preparadas con harina de mandioca y rellenas de carne vacuna y huevo duro picado.
- Cuyanas - Empanadas de múltiples gustos, jugosas y con mucha cebolla.
- Entrerrianas - Las clásicas suelen tener un agregado de arroz con leche.
- Pampeanas - La mayoría se prepara a base de carne con ají morrón, huevo duro y pasas de uva.
- Patagónicas - Muy variadas y preparadas con relleno de carne de cordero o guanaco, aunque también suelen ser de pescado.