Está ubicado entre las dunas, cinco kilómetros al oeste de la ciudad de Ica, en Perú. Está a 406 metros sobre el nivel del mar y cuenta con amplia vegetación y una oferta variada de hoteles para hospedarse.
Esta laguna que se convirtió en un oasis se llama Huacachina, que en quechua significa "mujer que llora". Lleva este nombre porque, según la leyenda, este lugar nació de las lágrimas de una mujer que lloraba la muerte de su amado.
En 2017, el periódico británico The Telegraph lo incluyó entre los 21 destinos "más impresionantes de mundo". Un dato no menor es que fue el único de América Latina que formó parte de la lista.


