Kéfir es el nombre del gato más grande del mundo, que fue adoptado a los pocos meses de su nacimiento por una mujer que vive en Rusia y, sorpresivamente, no para de crecer.
Este felino es de la raza Maine Coon, famosa por representar a gatos grandes. Por lo tanto, su dueña imaginó que iba a tener un tamaño por encima del promedio, pero nunca pensó en establecer un récord mundial.
Y, a pesar de que por su aspecto intimidante, Kéfir se comporta como todos los gatos e incluso es una mascota cariñosa y amable.
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¿Por qué Kéfir es el gato más grande del mundo?
A pesar de que aún no recibió el reconocimiento de los Récord Guinness, Kéfir es considerado el gato más grande del mundo porque pesa más de 12 kilos, mide 150 centímetros y, por lo tanto, tiene el tamaño de un perro grande.
Por otro lado, también se caracteriza por su gran pelaje blanco y su extensa cola que tiene prácticamente la misma longitud que su cuerpo.
Finalmente, otro dato curioso es que su nombre hace referencia a una marca de leche fragmentada, debido al intenso color de su pelo.
¿Hay posibilidades de que Kéfir siga creciendo?
El hecho de que Kéfir sea el gato más grande del mundo es muy llamativo, pero, la sorpresa se incrementa al conocer la edad del animal. Es decir, este felino gigante tiene tan solo 2 años.
Entonces, al tener en cuenta que los gatos Maine Coon pueden crecer hasta los 4 años, es probable que Kéfir sea incluso más grande.
Sin embargo, especialistas sostienen que frente al rápido crecimiento que tuvo el gato ruso, también hay probabilidades de que las estadísticas de la raza no influyan en este caso.
¿Cuáles son las características de la raza Maine Coon?
Maine Coon es una de las razas más antiguas de América del Norte, con fuerte presencia en su país de origen: Estados Unidos.
Por lo general, los ejemplares de esta especie tienen un peso que ronda los 5 kilos y que en muy pocas ocasiones superan los 8 kilos. Es por eso que Kéfir es un caso verdaderamente excepcional.
Entre otras de sus características, se encuentran sus patas grandes, su pelaje doble para soportar el frío y su esperanza de vida (12,5 años).
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En fin, los gatos Maine Coon alcanzan un tamaño sorprendente y, en cuanto a Kéfir, difícilmente exista otro ejemplar que logre superar sus dimensiones.
