Las voces se clasifican de acuerdo con su extensión, color y tesitura, es decir, según el rango de notas que los cantantes sienten más cómodo.
Los tipos de voces más frecuentes entre los hombres son “bajo”, “barítono” y “tenor”, mientras que los más habituales entre las mujeres son “contralto”, “mezzosoprano” y “soprano”, pero todos ellos tienen en común la utilización de las mismas partes del cuerpo al momento de cantar. A continuación, Billiken te cuenta cuáles son.
Pulmones, uno de los principales órganos del cuerpo que intervienen al cantar
Son estructuras anatómicas que pertenecen al sistema respiratorio. Su función es permitir la entrada de oxígeno en el cuerpo (mediante la inhalación) y expulsar el dióxido de carbono (a través de la exhalación).
Diafragma y su importancia
Es un músculo que pertenece al sistema respiratorio y está alojado justo debajo de los pulmones. Su función es controlar la expulsión del aire, y le da fuerza y contundencia a la voz.
Laringe, una pieza clave del cuerpo humano
Es un órgano del sistema respiratorio, situado entre la tráquea y la faringe, que tiene una forma parecida a la de un cono y está revestido de una membrana mucosa con cinco cartílagos principales.
Su función primordial es la de proteger la entrada de las vías respiratorias inferiores e intervenir en la producción de la voz.
También te puede interesar > Violeta Parra, la artista chilena considerada como una de las principales folcloristas de Sudamérica
Cuerdas vocales y su rol protagónico
Son pliegues musculares situados en la laringe que, al vibrar por el paso del aire, producen la voz. Es por eso que, para cantar bien, es necesario cuidarlas al máximo.
También te puede interesar > Mercedes Sosa, la mayor exponente del folclore argentino
Boca, la parte del cuerpo de mayor relevancia en el canto
Es la abertura por donde escapa el aire. Gracias a ella, es posible la pronunciación o articulación de los sonidos al hablar y/o cantar.