El 3 de junio de 2015 miles de personas salieron a las calles de Argentina bajo una consigna que se transformaría en histórica: “Ni Una Menos”. El grito colectivo surgió tras el femicidio de Chiara Páez, una adolescente santafesina de 14 años, y marcó un antes y un después en la lucha feminista en el país.
Lo que comenzó como una manifestación impulsada por periodistas, escritoras, artistas y militantes feministas, rápidamente se convirtió en un movimiento social y político que exigió frenar la violencia machista y colocar la problemática en el centro de la agenda pública.
El nacimiento de Ni Una Menos
El colectivo Ni Una Menos no surgió de la nada. Antes de 2015, ya existían denuncias y movilizaciones contra la violencia de género, pero la visibilidad de ciertos casos y la fuerza de las redes sociales encendieron la chispa.
La primera marcha reunió a multitudes en la Plaza del Congreso y en distintas ciudades del país. La consigna fue clara: “Vivas nos queremos”. Desde entonces, el 3 de junio quedó marcado como una fecha de memoria, reclamo y organización feminista en Argentina.
Entre los primeros reclamos del movimiento estuvieron:
- Crear registros oficiales de femicidios.
- Exigir políticas públicas de prevención.
- Garantizar la protección y asistencia a las víctimas.
De Argentina al mundo
Con el tiempo, Ni Una Menos dejó de ser solo un lema argentino y comenzó a replicarse en distintos países de América Latina y Europa. Inspiró marchas en Chile, México, Perú, España e Italia, donde las mujeres encontraron en esta consigna una forma común de nombrar la violencia de género y exigir justicia.
En 2016 se organizó el primer paro nacional de mujeres, una medida inédita en la región que visibilizó no solo los femicidios, sino también la desigualdad laboral, la precarización y la falta de acceso a derechos.
Ni Una Menos hoy
A diez años de su surgimiento, el movimiento sigue activo y vigente. Según datos de Amnistía Internacional, en Argentina todavía se registra un femicidio cada 26 horas, lo que muestra que la lucha está lejos de terminar.
Ni Una Menos logró instalar la problemática en los medios, en la política y en las familias. También impulsó campañas históricas como la que llevó a la aprobación de la Ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo en 2020.
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Hoy el desafío es sostener las conquistas y enfrentar nuevos debates: los discursos de odio, los intentos de retroceso en derechos adquiridos y la necesidad de garantizar una vida libre de violencia para todas las personas.
El sábado 27 de septiembre de 2025, se convocó a una nueva marcha en la plaza del Congreso para reclamar justicia por un triple femicidio ocurrido recientemente en la provincia de Buenos Aires. La cita es a las 4 de la tarde.
Una huella en la historia del feminismo
Ni Una Menos es, sin duda, un capítulo fundamental del feminismo en Argentina. Su legado está en cada movilización que recuerda a las víctimas, en cada ley conquistada y en cada voz que se alza para decir que la violencia de género no puede seguir siendo una realidad cotidiana.
