En Argentina, la promesa a la bandera es una de las ceremonias más importantes del calendario escolar. Año tras año, cada 20 de junio —fecha en la que se conmemora el fallecimiento de Manuel Belgrano y el Día de la Bandera— los y las estudiantes de cuarto grado de primaria participan de un acto solemne y emotivo.
La decisión de realizar esta promesa en cuarto grado no es casual. A esa edad, los niños y niñas ya alcanzaron cierta madurez escolar y tienen una noción más clara del concepto de "nación" y de los símbolos patrios. Además, en ese punto del ciclo escolar ya han estudiado quién fue Manuel Belgrano, por qué creó la bandera y cuál fue su legado.
¿Por qué la promesa a la bandera era una jura y cuándo cambió?

Antes de llamarse "promesa", esta ceremonia se conocía como "jura a la bandera", un término que se utilizaba en contextos militares. De allí sale la idea de juramento, que implicaba el compromiso de cooperar en la defensa de la comunidad, si era preciso tomando las armas y, en ocasiones, hasta perder la vida.
Por eso, desde hace años, el Ministerio de Educación de la Nación y el Instituto Nacional Belgraniano recomiendan hablar de "promesa" cuando se trata de infancias. Esto busca reconocer que las palabras tienen un peso simbólico acorde a la edad de quien las pronuncia.
Mirá También

Promesa a la bandera: todo lo que necesitás saber sobre esta ceremonia fundamental de la escuela primaria
Durante el acto, el o la docente —o en algunos casos, una autoridad— lee una fórmula que resalta los valores de libertad, justicia y respeto que representa la bandera argentina. Luego, los y las estudiantes responden al unísono con un "¡Sí, prometo!". Muchas veces, las escuelas suman canciones, bailes o representaciones teatrales para darle un marco aún más emotivo al evento.
¿Qué se promete y por qué es tan importante?

La promesa a la bandera no es solo un acto simbólico. También es un momento clave en la formación ciudadana. A través de esta ceremonia, los y las estudiantes expresan su compromiso con valores fundamentales para la convivencia democrática.
Según el Instituto Nacional Belgraniano, esta práctica fortalece el sentido de identidad y pertenencia. Y aunque no es obligatoria en términos legales, sí está muy arraigada en la tradición escolar del país.
Desde su incorporación al calendario escolar, esta ceremonia se volvió un momento inolvidable para generaciones enteras de estudiantes. Se realiza tanto en escuelas públicas como privadas, en zonas rurales y urbanas, e incluso en consulados y embajadas para quienes residen en el exterior.
Es muy común que muchas delegaciones de estudiantes viajen a Rosario, en Santa Fe, para realizar la promesa a la bandera en el Monumento Histórico Nacional a la Bandera. Este fue creado en el mismo lugar donde Belgrano izó la bandera por primera vez.

¡Te has suscrito correctamente!

Te enviamos un correo electrónico para confirmar tu suscripción.
Por favor revisa tu cuenta para confirmar que quieres formar parte de nuestra lista de contactos.

Hubo un error intentando realizar la suscripción.
Intente nuevamente más tarde
