A lo largo de la historia, miles de personas han utilizado su imaginación para modificar los medios de transportes y construir prototipos, a través de la fusión de dos o más máquinas. Uno de ellos fue el aerovagón de Valerian Abakovsky.
Así es. Este inventor soviético cambió la estructura de un vagón de madera tradicional y le agregó una hélice gigantesca en el sector trasero, que era impulsada por la fuerza de un motor de avión.
Como era de esperar, el diseño sorprendió a cientos de personas, que no podían creer la velocidad que este prototipo desarrollaba: 140 km/h.
¿Por qué Valerian Abakovsky creó un aerovagón?
El objetivo de Abakovsky, al crear el moderno aerovagón, era que el gobierno de la Unión Soviética disponga de un medio de transporte veloz para trasladar documentos importantes sobre rieles.
Pero, luego de que su proyecto recibiera el visto bueno, también expresó su interés de adaptar el prototipo para transportar a funcionarios, durante los viajes que deseen realizar por asuntos gubernamentales.
También te puede interesar > ¿Por qué Tanggula es la estación ferroviaria más alta del mundo?
Precisamente, durante una de estas travesías, el aerovagón sufrió un accidente fatal, en el cual siete personas perdieron la vida.
¿Qué ocurrió con este medio de transporte en 1921?
Tras permanecer en servicio durante cuatro años, el 24 de julio de 1921 el aerovagón de Abakovsky realizó su último viaje. El recorrido comenzó en Moscú y se organizó para trasladar a personal del gobierno hasta las minas de carbón de Tula.
Si bien el viaje de ida se completó con éxito y no surgieron inconvenientes, en su regreso a Moscú, el pequeño vagón descarriló mientras circulaba a toda velocidad y se destruyó en las inmediaciones de Serpukhov.
Lamentablemente, seis de los 22 pasajeros que se trasladaban, fallecieron en el momento del accidente. La séptima muerte ocurrió al poco tiempo, cuando un hombre herido de gravedad, no resistió.
También te puede interesar > ¿Sabías que en África existe un tren que tiene 3 kilómetros de largo?
Es importante mencionar que el creador del aerovagón, Valerian Abakovsky, viajaba en la formación y murió durante el accidente, que no sucedió por un error del vagón.
A diferencia de lo que muchas personas pensaban, el aerovagón, que sirvió como inspiración para medios de transporte similares que se crearon años después, perdió el control por el mal estado de la vía.
