Los efectos del cambio climático son cada vez más notorios: incendios forestales, inundaciones, temperaturas atípicas, entre otros fenómenos que afectan los ecosistemas y la calidad de vida de las personas. Para encontrar soluciones a esta problemática, se está llevando a cabo la Cumbre del Clima 2021 en la ciudad de Glasgow, Escocia, evento respaldado por la Organización de las Naciones Unidas (ONU) con apoyo de los gobiernos de Italia y Reino unido, que se realizará hasta el 12 de noviembre.

El calentamiento global es uno de los fenómenos más urgentes que se hace necesario atender. La Organización Meteorológica Mundial (OMM) informó que las concentraciones de gases de efecto invernadero que retienen el calor en la atmósfera alcanzaron un nuevo récord en 2020. El Dióxido de Carbono (CO2) creció 149 % respecto de los niveles preindustriales, el metano aumentó 262% y el óxido nitroso 123%.

Las cifras son alarmantes fundamentalmente por las consecuencias de este fenómeno, entre las cuales se encuentran, problemas de salud para la población, la desaparición de los arrecifes de coral de aguas cálidas, el derretimiento de hielo ártico y antártico, el incremento de la temperatura terrestre y el aumento del nivel del mar.

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En este campo, muchos jóvenes de todos los países tomaron la causa del cambio climático y, convencidos de que son la última generación que puede hacer algo al respecto, están trabajando para exigir a los gobiernos políticas públicas que contribuyan a cuidar el medio ambiente. El ejemplo más conocido es el de Greta Thunberg, la joven activista sueca que lucha para que los estados tomen medidas respecto al calentamiento global. Su trabajo ha inspirado a muchos otros jóvenes de otras latitudes. Vamos a conocerlos.

Alexandria Villaseñor tiene 16 años, es de origen latino y vive en Nueva York. Un incendio forestal en California, su ciudad natal, durante una visita que realizó, la hizo vivir una experiencia que la marcaría. Más de 80 personas murieron y cerca de catorce mil hogares fueron destruidos como consecuencia del incendio. Desde entonces, la joven comenzó a protestar cada viernes, desde el 14 de diciembre de 2018, frente a la sede de Naciones Unidas, y lideró la primera huelga estudiantil contra el cambio climático en Estados Unidos. Además, fundó su propia organización.

Jamie Margolin vive en Seattle, Whashington pero su primera lengua es el español porque su madre es colombiana. Comenzó su activismo medioambiental a partir de su propia experiencia en dos acontecimientos. Uno fue la falta de respuesta efectiva al Huracán María, que devastó Puerto Rico en 2017. El otro, una nube de humo proveniente de incendios forestales en la vecina Canadá que cubrió su ciudad y le ocasionó dificultades para respirar. Junto a otros 12 jóvenes, la adolescente demandó al estado de Washington por "empeorar la crisis climática y de esa forma negar a los jóvenes su derecho constitucional a la vida, la libertad y la búsqueda de la felicidad".

En chile, Dominga Espiñeira, quien actualmente tiene 18 años, subraya la falta de nieve en Santiago, su ciudad, además de las sequía y el sufrimiento de los animales. Por eso, se sumó al movimiento FridaysForFuture, el movimiento internacional principalmente estudiantil que se manifiesta para reclamar acciones contra el calentamiento global y el cambio climático.

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Desde Uruguay, Ariana Palombo, una joven de 21 años que también forma parte del movimiento, resalta las problemáticas propias de Latinoamérica, como la sobreproducción de materias primas que se exportan, la explotación de territorios, la contaminación producto de la ganadería, y el uso de agrotóxicos, entre otras cuestiones que afectan negativamente al medio ambiente.

En tanto, la argentina Chiara Sacchi es parte del grupo de activistas que han solicitado al Comité de los Derechos del Niño de Naciones Unidas que responsabilice a cinco de los países más contaminantes del mundo: Argentina, Brasil, Francia, Alemania y Turquía. Otro argentino destacado en la lucha contra el cambio climático es Bruno Rodriguez, de 21 años, quien participó en Nueva York junto a Greta Thunberg de la primera Cumbre Juvenil del Clima de Naciones Unidas (Youth Climate Summit) y se reunió con cien líderes climáticos a nivel global, además de haber fundado la organización Jóvenes por el Clima Argentina. La entidad es un movimiento social y político encabezado por jóvenes del país que se proponen introducir la cuestión climática en la agenda pública e instalar esta problemática como un eje central de las políticas públicas tomadas por los gobiernos.

El tiempo es ahora. Y nosotros, desde nuestras casas, también podemos aportar nuestro grano de arena. Acá, algunos ejemplos de cómo hacerlo:

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