Un "vagido" hace referencia a un tipo de llanto muy particular. Sin embargo no muchos saben a qué refiere.
Pasa que en nuestro idioma hay muchísimas palabras; tantas, que no resulta raro que algunas se nos escapen. Según el diccionario de la RAE, la lengua española está conformada por al menos 93.000 palabras. Es el equivalente al número de entradas que posee su página web.
Decimos "al menos" porque, obviamente, hay más que no están ahí aunque se usen. No obstante, múltiples estudios estiman que los más 591 millones de hablantes nativos sólo usan entre 5.000 y 7.000 palabras en el día a día.
¿Qué es un vagido?
"Vagido" es la palabra que usamos en español para denominar al primer llanto de un bebé. Distinto a los lloriqueos que vendrán más tarde en la vida del recién nacido, este primer llanto es motivo de celebración ya que funciona como señal de buena salud.
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La palabra viene del término en latín ‘vagitus’ y éste del verbo ‘vagire’, que hace referencia a un grito o gemido. También está relacionado con Vaticanus o Vagitanus, una deidad romana relacionada con el acto del parto.
Según contaba Aulo Gelio, un erudito del siglo II, la entidad de Vaticanus tutelaba los primeros pasos de la voz humana. Por eso prestó su nombre al sonido de esta primera evidencia de voz.
¿Por qué lloran los bebés?
Si tenés un bebé llorando en tus brazos, lo más probable es que esté intentando decirte que necesita algo.
Evolutivamente hablando, las crías de los mamíferos lloran como señal para sus padres de que necesitan atención inmediata. Los expertos identifican que la razón más común por la que lloran los bebés es, simplemente, el hambre.
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Todo el mundo se pone de mal humor cuando tiene hambre, sobre todo los bebés: pueden pasar de cero a gritos desquiciados con bastante rapidez si llevan un rato sin comer.