A lo largo de todo el mundo, los seres humanos son muy distintos. Una gran cantidad de culturas, etnias y razas hacen del planeta tierra un lugar diverso. Pero si bien la población mundial ronda los 7.700 millones de personas, muy pocas tienen características o habilidades fuera de lo común.
Solo el 1% de la población mundial tiene el cabello rojo. El color es producto de una pequeña mutación que apareció hace unos 50 mil años dando lugar al gen MC1R. Este gen pertenece a la misma familia de genes relacionados con el dolor. Por eso las personas pelirrojas son más sensibles al dolor, debido a las limitaciones de endorfinas, uno de los analgésicos naturales del cuerpo. Así, los pelirrojos necesitan un 20% más de anestesia en las intervenciones quirúrgicas que las personas con cualquier otro color de pelo.
Los pelirrojos generan su propia vitamina D. Al no poder absorber suficiente debido a la baja concentración de eumelanina en su cuerpo, producen su propia vitamina D en condiciones de poca luz. Además, son más sensibles a los cambios de temperatura.
Irlanda y Escocia tienen el mayor porcentaje de población pelirroja: un 11% y un 13% respectivamente. En tercer lugar aparece Inglaterra, con un 6,5% de colorados.
Cada 7 de septiembre, desde el año 2006, se celebra el Día Mundial del Pelirrojo.