La capital de la provincia de Tierra del Fuego alberga maravillas naturales y paisajes hermosos, además de un rica historia. En esta nota, Billiken te cuenta más sobre esta ciudad que es puerta de entrada a la Antártida.
Ushuaia es la ciudad más austral del mundo. Ubicada entre el último tramo de la Cordillera de los Andes y el canal de Beagle, es la capital de la provincia de Tierra del Fuego y se ha desarrollado como un gran destino turístico.
Su nombre proviene de la lengua Yámana y significa “bahía que mira hacia el poniente”. La fundación de la ciudad se reconoce a partir de la creación de la Subprefectura Naval de Ushuaia el 12 de Octubre de 1884.
Por su latitud (54° Sur) Ushuaia posee la particularidad de contar con la noche más larga en invierno y el día con más horas de luz en verano. De las cinco ciudades en el mundo reconocidas como “puertas de entrada” a la Antártida, Ushuaia es el puerto más cercano, a sólo 1000 kilómetros de distancia de la Península Antártica.
La isla posee un clima subpolar pero las temperaturas no llegan a ser demasiado bajas, como en latitudes similares del hemisferio norte, debido a que la masa oceánica que la rodea ejerce un efecto moderador. En verano, la luz solar puede extenderse hasta por 18 horas, con un amanecer que comienza alrededor de las tres y media de la madrugada y una puesta de sol posterior a las diez de la noche. En tanto, en invierno se celebra la Fiesta Nacional de la Noche más Larga. En general, las nevadas mas copiosas se registran en los meses de julio y agosto. Las últimas precipitaciones de nieve y el subsecuente deshielo ocurren en septiembre. Durante la época invernal, sólo hay 7 horas de luz.
La ciudad de Ushuaia, capital de la Provincia de Tierra del Fuego, está a 1.000 Km de la Península Antártica, un territorio de reserva natural consagrado a la ciencia y a la paz. Así, la ciudad más austral es la puerta de entrada más importante del mundo para ingresar a la Antártida.
Los primeros pobladores de las tierras de Ushuaia fueron nómades. Mucho después, en 1869 se estableció el primer asentamiento no aborigen que para 1884 ya contaba con 300 habitantes. Por entonces, el comodoro Augusto Lasserre creó una subprefectura junto a la misión anglicana, izando en ella la bandera argentina que tenía por objetivo reafirmar la soberanía argentina en la zona.
No hubo delimitación de calles ni manzanas hasta 1894. El caserío en expansión se volvió un pintoresco pueblo multicolor. A inicios del siglo XX, en 1902, se construyó en las vecindades de la entonces aldea de Ushuaia el célebre presidio, el cual estuvo en servicio como cárcel hasta mediados del mismo siglo. Esta institución introdujo en la ciudad la construcción en mampostería y piedras, adoptadas por algunos vecinos en edificios que demuestran su durabilidad, pero no se popularizó. En 1947, el presidio fue cerrado por orden del entonces presidente Perón, siendo Director del Servicio Penitenciario Federal Roberto Pettinato.
El edificio pasó a manos de la Armada Argentina y tras un tiempo de abandono, alberga en la actualidad al Museo Marítimo y del Presidio de Ushuaia.
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