Muchos de nosotros gesticulamos con las manos cuando hablamos -e incluso cuando no estamos emitiendo palabra alguna- como forma de comunicación no verbal.
Sigue sin estar del todo claro cómo se coordinan los gestos de las manos con el habla, pero los expertos lograron llegar a algunas pistas.

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¿Por qué gesticulamos con las manos al hablar?

La gesticulación manual cohablativa -así llaman los expertos y expertas al acto de mover las manos cuando charlamos con alguien o explicamos algo- desempeña un papel súper importante en la comunicación.
Se trata de un mecanismo que, aunque no lo sepamos ni pensemos voluntariamente, busca enfatizar y desambiguar la semántica de una frase.
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De hecho, se puede considerar el acto de hablar como una gran partitura orquestal en la que intervienen el movimiento del tracto vocal, la respiración, la voz, el tono, la expresión facial, los gestos de las manos. Incluso hay posturas del cuerpo que se acoplan al resto de los instrumentos coordinados dinámicamente por el cerebro.
¿Sabías que el gesto manual ayuda a convencer a otros?

Gesticular al hablar te hace más persuasivo/a. Mover las manos tiene un impacto visual: te pone en el centro de atención. Puede que tus palabras describan algo, pero tus manos lo convierten simbólicamente en acción.
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La razón es que los movimientos del gesticulador le dan escala humana a una idea abstracta y eso ayuda que los demás entiendan mejor tu mensaje.
Un estudio llevado a cabo sobre empresarios que hacían presentaciones para atraer financiación para sus empresas puso a prueba esta relación entre nuestras manos y el poder de persuasión. Al final, encontraron que los que utilizaban movimientos de las manos para reforzar sus argumentos tenían un 12% más de probabilidades de conseguir la plata que pedían.
