El Castillo Wulff, que se encuentra frente al océano Pacífico, en la ciudad chilena de Viña del Mar, es uno de los más sorprendentes de Sudamérica por su ubicación, historia y aspecto.
Esta mansión, que en tiempos pasados tuvo tres torres, está en pie desde 1906. Y, durante los últimos 119 años, tuvo numerosas facetas icónicas. Es por eso que, desde el 20 de septiembre de 1995, es un Monumento Histórico Nacional.
Por fortuna, la construcción resistió todos los cambios mencionados y actualmente se encuentra en perfecto estado. En su interior hay un centro de exposiciones, que representa la mejor alternativa para conocer los detalles del edificio.
¿Quién solicitó la construcción del Castillo Wulff?
A mediados de 1881, el filántropo alemán Gustavo Wulff llegó a Chile y rápidamente pidió permiso para construir una vivienda frente al mar. Sin embargo, no recibió la autorización hasta 1904.
Un año después, el europeo supervisó el inicio de la obra, que concluyó en 1906. En pocos meses, los trabajadores que participaron en la construcción lograron terminar un edificio que:
- Se divide en dos pisos.
- Tiene un aspecto similar al de una antigua mansión de Liechtenstein.
- Se diseñó con piedra y madera.
- Lucía tres grandes torres, con dos terrazas en cada una.
Cuatro años después de su apertura, la estructura ya recibió modificaciones. Puntualmente, en 1910 el arquitecto Alberto Cruz Montt, por decisión de Wulff, cubrió la fachada de piedras.
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Una década después, el propietario solicitó la instalación de un torreón circular que conectara el edificio con un puente de estilo medieval, además de una ampliación en las ventanas.
Finalmente, Gustavo Wulff frecuentó el castillo que lleva su apellido hasta el año 1946, cuando falleció.
¿Qué ocurrió con el Castillo Wulff después de 1946?
Ante el fallecimiento de Gustavo Wulff, la mansión quedó en manos de Esperanza de Artaza Matta. La nueva propietaria decidió aportarle un estilo inglés al lugar y es por eso que, entre múltiples decisiones, la más polémica fue quitarle dos torres.
Artaza Matta conservó el sitio hasta 1959, cuando pasó a pertenecer a la Municipalidad de Viña del Mar, que en 1960 lo cedió a la Armada de Chile, con el objetivo de que allí se instalara el Museo Naval y Marítimo. Este espacio cultural permaneció en las instalaciones hasta 1989.
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Un año después del último hecho mencionado, el Castillo Wulff se transformó en una dependencia del Museo de la Cultura del Mar. Un rol que conservó hasta 1999, cuando quedó vacío.
Así, durante el inicio del siglo XXI, la propiedad volvió a pertenecer a la Municipalidad de Viña del Mar en 2001 y, desde 2005, se identifica como Unidad de Patrimonio Municipal y centro de exposiciones.
¿En qué parte de Viña del Mar está el edificio?
Visitar el Castillo Wulff, que desde 1995 es un Monumento Histórico Nacional de Chile, es sencillo, ya que se encuentra en pleno centro de Viña del Mar, entre la desembocadura del estero Marga Marga y el balneario Caleta Abarca.
Para visitarlo desde el sur de la ciudad, es necesario viajar por la Avenida España y luego tomar un pequeño desvío por la Avenida La Marina. En el caso de ingresar desde el norte, hay que cruzar el puente del casino y realizar un breve giro a la derecha.
