Muchos elefantes han sido víctimas de explosiones de minas terrestres en la frontera entre Birmania y Tailandia. Así fue como Mosha sufrió un accidente que le costó una de sus piernas delanteras, pero tuvo la suerte de haber sido atendida en el primer hospital de elefantes del mundo. Se trata de la fundación “Friends of the Asian Elephant”, creada en 1993 en la ciudad de Lampang, al norte de Tailandia.
Hasta el momento, Mosha recibió más de 10 prótesis distintas ajustándose a sus tamaños debido a su continuo crecimiento. Los elefantes en Asia pueden vivir hasta más de 40 años y Mosha estaba recién en el principio de su vida cuando tuvo su accidente. Por estas razones, el Dr. Therdchai Jivacate junto al resto del equipo de FAE diseñaron una pierna ortopédica ya que según el mismo doctor, el animal no hubiera sobrevivido sin ella.
Actualmente, Mosha puede vivir y caminar de una manera normal gracias a su prótesis. Además, a medida que renuevan sus piernas ortopédicas por el crecimiento, las nuevas versiones son cada vez más desarrolladas y sofisticadas que la anterior, para mayor comodidad de los elefantes.