Al pensar en camellos, es fácil imaginar que casi todos los ejemplares están distribuidos entre países de África y Asia. Pero, para sorpresa de muchos, en Australia existe una enorme población.
Según cálculos recientes, en este enorme país de Oceanía conviven cerca de un millón de camellos, que pertenecen a la especie “Camelus dromedarius” y que es la única que presenta una sola joroba.
Pero, ¿cómo llegaron estos animales a tierras tan lejanas? Te contamos los detalles a continuación.
¿Quiénes trasladaron los primeros camellos a Australia?
El camello arábigo, que es una de las tres especies de camellos que aún sobreviven en el mundo, es nativo de la península arábiga. Durante miles de años, solo habitó en esta zona.
Luego, algunas poblaciones se expandieron por el resto de Asia e incluso conquistaron tierras en países emplazados en el extremo norte de África, así como también en el desierto del Sahara.
Sin embargo, no fue hasta el cierre del siglo XVIII y comienzo del siglo XIX que, mediante una expedición inglesa, los primeros ejemplares viajaron en barco a Oceanía y se establecieron en el actual suelo australiano.
¿Cómo quedaron en libertad estos animales?
En esta época de la historia, un grupo de camellos arábigos llegó desde las islas Canarias a Australia, con el objetivo de crear una población estable y utilizar a los ejemplares adultos como medio de transporte.
Pero el panorama cambió décadas más tarde, cuando se crearon los primeros automóviles y ya no eran necesarios los camellos para realizar extensos viajes por el país.
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De esta manera, los ejemplares se liberaron. Acto seguido, se adaptaron sin problemas a las condiciones geográficas y climáticas de Australia y, finalmente, crearon una población salvaje de aproximadamente un millón de ejemplares.
¿Qué características representan a los camellos de Australia?
Además de conocer las características de la curiosa llegada de los camellos a Australia, también es importante aprender las curiosidades del “Camelus dromedarius” que:
- Es un mamífero artiodáctilo.
- Tiene pelo corto.
- Es el camello más grande que aún sobrevive, con ejemplares de hasta 3,6 metros de altura y 690 kilogramos de peso máximo.
- Luce un cuello largo y curvado.
- Permanece activo durante el día.
- Se traslada en manadas de 20 individuos.
- Puede beber hasta 150 litros de agua en poco tiempo.
