En el mundo es cada vez más frecuente la obtención y utilización de las energías renovables. Una de ellas, la solar, es fundamental para aprovechar los beneficios que aporta la estrella y es por eso que múltiples países tienen grandes proyectos agrofotovoltaicos en sus tierras.
Pero, además de los factores positivos más conocidos de construir un campo de paneles solares, dichas instalaciones también favorecen a las abejas, entre muchos otros insectos, que allí conviven.
Es decir, crean un hábitat natural ideal para el crecimiento de la especie y su supervivencia.
¿Por qué los proyectos agrofotovoltaicos favorecen a la población mundial de abejas?
Mediante el inicio y el desarrollo de proyectos agrofotovoltaicos, es posible construir enormes instalaciones de paneles solares que almacenan una gran cantidad de energía solar.
En simples palabras, esta energía es esencial para reducir la contaminación del planeta y, al mismo tiempo, abastecer lugares y/o viviendas que carecen de un acceso a la electricidad por cables.
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Pero, en simultáneo, un estudio de cinco años que se realizó en áreas rurales de Minnesota, Estados Unidos, demostró que estos proyectos también ayudan a incrementar la población mundial de abejas porque:
- Crean espacios de sombra.
- Reducen la evaporación del agua de riego.
- Las protegen de olas de calor.
- Las alejan de zonas con pesticidas.
¿En qué se benefician los humanos con el crecimiento de la población de este insecto?
Es correcto mencionar que las abejas cumplen un rol esencial para la producción de miel. Y, si bien es cierto, también es importante resaltar otros beneficios que el insecto aporta a los humanos. Por ejemplo:
- Intervienen, de manera favorable, en el 80% de los alimentos de consumo mundial, a través de la polinización.
- Polinizan el 75% de las plantas que producen flores.
- Ayudan a mantener una estabilidad ambiental.
- Permiten la producción de cera, propóleo y jalea real.
- Aportan a la cosmética, medicina y alimentación.