Billiken tiene un vinculo profundo con la educación: a lo largo de los años proveyó en las páginas de su revista material educativo de calidad para millones de niños, que aun hoy, ya de adultos, recuerdan sus días de infancia recortando las figuritas de Billiken y pegándolas en el cuaderno, o llevando las láminas al aula.
En esta nota, repasamos los puntos fuertes de la relación de nuestra marca con el mundo educativo, desde las figuritas de Billiken a los recursos educativos de hoy en día. Es que Billiken y la escuela, ¡son un solo corazón!
La historia: historietas, láminas y las figuritas de Billiken
En los primeros años publicaba notas relatando las infancias de los próceres pero fue a partir de 1925 que la revista empezó realmente a proveer material escolar. En ese momento, Carlos Vigil, hijo del fundador Constancio C., era el director. Él se daba cuenta de que muchas escuelas querían cubrir las paredes de sus aulas con láminas coloridas para enseñar a los alumnos sobre geografía, historia y el mundo natural. Como estas láminas eran muy caras, Don Carlos empezó a incluirlas dentro de Billiken sin subir el precio de la revista.
En la década de 1930 Billiken publicaba “Nuestra historia”, una serie gráfica pensada para complementar lo que se enseñaba en las escuelas pero de una manera más divertida.
A partir de 1937, Billiken empezó a tomar el contenido educativo más en serio. Se agregaron ocho páginas extras dedicadas a la escuela, divididas por grado y materia. Los temas empezaron a seguir el calendario escolar. Por ejemplo desde 1938, en el Día de la Tradición, nunca faltaban unos versos de Martín Fierro en la página de “Iniciación literaria”.
Para la década de 1940, el ciclo de las fechas patrias se reflejaba tanto en la tapa como en el material escolar dentro de la revista. Billiken empezó a convertirse en fuente indispensable para completar la tarea escolar.
Fue en la década de 1960 que la revista empezó a incluir las famosas figuritas para recortar y coleccionar en un álbum. Cuando los lectores empezaron a pegarlas en sus cuadernos escolares, Billiken se adaptó y ofreció más figuritas para completar los deberes (Imagen 6). Tan conectada estaba la revista con la escuela en esos años que hasta publicaba una página para maestros llamada “Actualidad docente”.
La actualidad: recursos educativos descargables gratuitos
¡Cuántas cosas cambiaron, ¿no?! Pero hay algunas que siguen siendo igual: Billiken siempre intenta demostrar que aprender es divertido. Y seguimos apoyando a los educadores con recursos que faciliten su trabajo y ayuden a los estudiantes a aprender más y mejor. Por eso disponibilizamos secuencias didácticas gratuitamente para que lleguen a todas las aulas. Porque Billiken y la escuela… ¡un solo corazón!
La Dra. Lauren Rea nos ayudó con los datos y la selección de imágenes. Es profesora e investigadora de estudios latinoamericanos de la Universidad de Sheffield, en el Reino Unido. Está haciendo un proyecto de investigación sobre la historia de Billiken usando el gran archivo de la revista, y esta nota es producto de su trabajo. Pueden compartir sus recuerdos de la revista Billiken en Facebook en los comentarios de esta nota para contribuir al proyecto de investigación.