Este tanque fue montado sobre un Falcon modelo '79 que le perteneció a las Fuerzas Armadas de la última Dictadura Cívico-Militar. Raúl Lemesoff lo convirtió en una biblioteca rodante para fomentar el interés por la lectura y la cultura.
Lo construyó con libros que estaba por desechar un papelero. Una parte de ellos los utilizó para formar la estructura y otros para regalar. Recorrió varias provincias argentinas para entregar gratuitamente estos ejemplares y recibió otros como donación.
Este vehículo es una "escultura rodante" que puede cargar hasta 900 libros distintos. En un principio, el objetivo del artista era acercar material a las zonas más carenciadas del país para facilitar el acceso a la cultura. Luego, expandió sus horizontes y se trasladó por distintas partes.