Los neutrinos podrían revolucionar el sector tecnológico y energético en un futuro cercano. Todos los artefactos eléctricos que utilizamos de manera cotidiana, desde electrodomésticos hasta autos y celulares que utilizan enchufes, pilas o baterías para su funcionamiento, podrán ser reemplazados por artefactos idénticos alimentados directamente por captores de energía de neutrinos. Esta nueva energía no perjudicará al medioambiente ya que se trata de partículas energéticas presentes en la atmósfera terrestre y en el universo, son partículas que nos rodean todo el tiempo. En contraparte a la producción de energía convencional que produce un impacto negativo sobre el ecosistema, ya sea a través de centrales atómicas, centrales hidroeléctricas o centrales térmicas a quema de materiales fósiles, los neutrinos son una fuente infinita e inagotable de energía que no depende de las condiciones climáticas, a diferencia de las energías renovables como la solar o eólica.
Estas partículas subatómicas de energía fueron descubiertas en 1930 por el físico Wolfgang Pauli y durante décadas se consideró que no tenían masa. Fue en el año 2015 cuando el investigador japonés Takaaki Kajita y el canadiense Arthur B. McDonald, estudiando las oscilaciones de los neutrinos, demostraron que efectivamente tienen masa y, por lo tanto, podían generar energía. Este descubrimiento les valió el Premio Nobel de Física.
Estas micropartículas 100 veces más pequeñas que un átomo bombardean constantemente nuestro planeta y fueron generadas en el Big Bang, están presentes desde el inicio del tiempo, en nuestro sistema solar y en cualquier lugar del universo. La mayoría de los neutrinos que llegan a la Tierra son irradiados por el Sol. También pueden ser liberados cuando los rayos cósmicos gamma chocan con la atmósfera de nuestro planeta.
Actualmente, científicos de todo el mundo están buscando fórmulas capaces de aprovechar la energía de neutrinos. Uno de los ejemplos más concretos es el desarrollo del vehículo “Pi”, el primer automóvil ecológico que funciona con esta energía y tiene nula misión de contaminantes al el medio ambiente y una autonomía infinita. Esta revolucionaria tecnología le permitirá a Pi recorrer largas distancias sin necesidad de recargas, a diferencia de los autos eléctricos, recibiendo constantemente la energía de neutrinos, generando la electricidad necesaria para mover sus motores eléctricos y la carga de sus baterías suplementarias incluso cuando esté estacionado.
