Las matrículas automovilísticas o patentes son, como sabemos, la identificación de un vehículo automotor. Ya sea una moto, auto o camión, cada uno debe llevar esa patente para poder diferenciarse del resto. Es, en otros términos, el DNI automóvil.
Desde 2016, las patentes se componen de una serie de dos letras, tres números y dos letras con el motivo de evitar la formación de palabras. Previo a esa, se emitía un formato de tres letras y tres números. Ambas siguen circulando, y en ambos tipos se pueden encontrar algunas letras pequeñas que escapan a la serie, como "D", "T" y "C". ¿A qué se debe esto?
¿Cuál es el motivo detrás de las letras pequeñas en las patentes?
Curiosamente, las letras pequeñas no están vinculadas al número de matrícula en sí, sino a la cantidad de veces que esa misma patente fue emitida.
Ante la pérdida, el deterioro o el robo de una, existe la posibilidad de solicitar ante Registros de la Propiedad Automotor que la chapa patente se fabrique nuevamente, como muchos conductores sabrán por experiencia propia. Y, en tales casos, se añadirá una letra en relación a la cantidad de veces que se emitió nuevamente: Es decir:
- "D" vale por "duplicado".
- "T" vale por "triplicado".
- "C" vale por "cuadruplicado".
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Como puede suponerse, lo más común es encontrar patentes con la letra "D" antes que la "C" ya que parece muy improbable que tenga que emitirse cuatro veces una misma matrícula. Sin embargo, vasta con una caminata de diez minutos por las calles más transitadas de las ciudades argentinas para encontrar los tres tipos de letras.
La identificación sirve, además, para saber cuál es la placa válida en casos de robo. Así, si alguien quisiera utilizar una placa robada para otro automóvil, no sería tomada como válida porque la que registra el sistema es la última emitida. Es decir, la que sea duplicada, triplicada o cuadruplicada.
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¿Cuáles son los pasos a seguir para obtener un duplicado de la chapa patente?
Según el Registros de la Propiedad Automotor (DNRPA), se debe duplicar la chapa patente en caso de robo, pérdida o deterioro. Para iniciar el proceso, es necesario contar con:
- Documento de identidad.
- Cédulas del vehículo.
- Título del vehículo.
- La patente extra, en caso de que sólo una de las dos se hubiera perjudicado.
Luego, se debe completar una solicitud electrónica, abonar por el servicio y acercarse a alguna de las oficinas para completar distintos formularios. Por último, se entregará a la persona una placa provisoria de papel hasta recibir las patentes duplicadas. En este enlace se detallan los pasos a seguir.