Julio Manuel Pereyra es un maestro que fundó Caminos de Tiza, una escuela que ejerce la Educación Comunitaria Itinerante desde el voluntariado en contextos rurales, barriales, selváticos y basurales.
Además de ser la única escuela ambulante del país, destaca por ser inclusiva: propone adaptaciones didácticas para todos aquellos que tengan necesidades especiales para el aprendizaje y también para las personas con discapacidad.
Durante las clases se enseñan las cuatro materias básicas de la primaria: Lengua, Matemática, Ciencias Sociales y Naturales. Sin embargo, se incluyen talleres con temáticas que varían según el momento.
Por su importancia, este proyecto recibió distintos reconocimientos a nivel mundial, como por ejemplo el Global Teacher Awards, un premio que se le otorga a un educador innovador y comprometido.