La menta es una hierba que está dentro de la familia de las lamiáceas. Se caracteriza por su aroma y su sabor, pero además tiene un montón de propiedades que pueden ayudar a que las personas gocen de una mejor salud.
Es de origen europeo, aunque también crece naturalmente en Asia Oriental y América del Norte. Se utiliza en gastronomía y perfumería y, antiguamente, estaba estrechamente ligada al cuidado y se utilizaba para infusiones o curaciones.
Tal vez parezca que es un elemento difícil de combinar con la vida cotidiana, pero una forma muy fácil de incorporarla es en las infusiones. Una de ellas es el mate, muy consumido en países de América del Sur.
¿Cómo combinar la menta y el mate?
La menta tiene varios beneficios para la salud. Algunos de ellos son: mejorar la digestión, porque estimula la secreción biliar; reducir los dolores corporales, especialmente los dolores de cabeza, ya que tiene efectos anestésicos leves; la presencia de mentona permite contrarrestar el cansancio mejora los receptores del sistema nervioso central y también ayuda a descansar mejor.
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Al combinarlo con el mate, estas propiedades se exacerban. Además, se suman las que tiene la infusión:
- Es antioxidante,
- Mejora la digestión,
- Ayuda a bajar de peso,
- Mejora el sistema inmunológico, gracias a la presencia de vitaminas B y C.
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La mejor manera de preparar esta infusión es mezclar la hierba con el agua, una vez que ya se haya alcanzado la temperatura adecuada. Los aficionados del mate recomiendan que se beba a 80ºC y que luego de llenar el mate con la cantidad de yerba necesaria, se agregue un poco de agua tibia para no quemarla. Una vez listo, se puede empezar a cebar con el agua con menta.
