Todos los años, la temperatura media aumenta aproximadamente 1,5 grados Celsius (ºC). Ese fue el compromiso que tomaron los líderes mundiales ante la lucha contra el cambio climático. Es posible que en los años que vengan, se rompan los récords de temperatura más alta registrada en el mundo, aunque hay lugares que son más propensos a sufrirlas.
Cada vez hace más calor debido a las actividades humanas, principalmente la quema de combustibles fósiles. Al liberar dióxido de carbono a la atmósfera, contribuye al conocido efecto invernadero.
El año pasado, la temperatura promedio global fue 17° C más que la más registrada hasta el momento, desde 1979, por los Centros Nacionales de Predicción Ambiental de la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
La temperatura más alta registrada en el mundo fue en Irán y México
Uno de los lugares del mundo en donde se rompió este récord fue el desierto de Lut, en Irán. Se ha registrado una temperatura oficial de 80,8 °C. Este clima hace que el lugar sea prácticamente inhóspito para la vida humana y de otras especies de plantas y animales. En el desierto de Sonora, en la frontera entre México y Estados Unidos, se registró la misma temperatura.
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Anteriormente, la marca la tenía el Valle de la Muerte, en California. El 10 de julio 1913 se registraron 56,7° C. Mantuvo la marca hasta mayo del 2021.
Altas temperaturas y cambio climático
Durante el 2023, el calentamiento global superó los 1,5º C por primera vez en la historia. Los líderes políticos del mundo habían asumido el compromiso de que esto no sucediera para retrasar y mitigar los efectos del cambio climático, con la firma del Acuerdo de París, en el marco de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático. Allí se establecen medidas para la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero.
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Aunque el mundo esté marcando los registros más cálidos de la modernidad, no quiere decir que todo esté perdido. Los expertos afirman que si se toman medidas urgentes para reducir la emisión de carbono, es posible frenar el aumento de temperatura.
